Nací en el 76. Tengo algunos flashes de España 82, pero sinceramente creo que lo que recuerdo son los resúmenes de los canales de televisión. El primer partido de Perú que puedo jurar que vi es el del gol de Navarro a Chile. 

Así que crecí con las famosas frases “ya vienen los goles de Cubillas”, “en el Perú los jugadores son muy técnicos”, “Perú tierra de arqueros” y “jugamos como nunca y perdimos como siempre”, entre otras. La que realmente me causa mucha risa es la de tierra de arqueros, nunca entendí a quién se le ocurrió tal barbaridad ni cómo hizo para que se popularice la barrabasada (me imagino que era alguien que hablaba de los años 60 para atrás). La otra que me parece ridícula (y cada día más y más) es la de que los futbolistas peruanos son dotados técnicamente. El hecho de que en Perú todos hayamos jugado más fulbito que fútbol no nos convierte en más técnicos. El pase corto es un fundamento básico en el aprendizaje del fútbol, es decir, a los 10 años deberíamos tenerlo dominado. El lujo es un arma de doble filo. En Perú tenemos la costumbre de admirar a las personas que hacen “huachas”, “sombreritos”, “ruletas” o cualquier otro recurso avanzado. Pero lo que debemos evaluar es si ese recurso era necesario en ese momento, si valió la pena el riesgo y sobre todo, si funcionó. La técnica no es solo parecer un crack en la cancha, es dominar todo tu cuerpo para sacar provecho en el partido y golpear el balón con la fuerza adecuada y con todas las partes del cuerpo humano (si es necesario). No puedo creer que el peruano sea técnico si en los partidos de la selección perdemos la mayoría de los pases cortos e intermedios, si en juego aéreo somos peores que Bangladesh, si no podemos controlar un balón bajo presión y un largo etcétera.

Volviendo al grano que ya me salí del tema. La frase que nunca olvidaré de todos mis procesos eliminatorios (del 86 al 2018) es “Matemáticamente no estamos eliminados”. A esto siempre le sigue el comentario del “erudito” que dice: Si Uruguay pierde con Bolivia 8-0 en Montevideo y nosotros le ganamos 5-0 a Brasil clasificamos 5tos (o sea repechaje).

Obvio que éste y otros recursos periodísticos son usados por los medios de comunicación para seguir vendiendo humo y embruteciendo aún más a nuestro querido pueblo.

Las matemáticas y/o estadísticas sí nos pueden dar un análisis más verídico del futuro de nuestra selección en las actuales eliminatorias pero siempre será un análisis parcial, ya que cada partido depende de infinidad de aspectos cualitativos y cuantitativos:

- El nivel actual de cada jugador, su temperamento, su situación emocional o profesional.

- El nivel actual de cada equipo, el juego colectivo, la solidez de GRUPO, la garra, los galones, etcétera.

- Aspectos adicionales que pueden ser coyunturales, de organización, dirigenciales, errores arbitrales, obras del albur y miles de cosas más.

- A nivel cuantitativo también hay una serie de factores: Valor económico de cada jugador, valor de la liga en la que participa o el valor de la cláusula de rescisión de dichos jugadores por dar algunos ejemplos.

En este análisis me he centrado en un solo aspecto cuantitativo para evaluar nuestras posibilidades en la Copa América 2016. Obvio que ya pasó la Copa América, pero justo por eso esperé este momento para redactar con la cabeza fría y ver si el método se acerca o no a la realidad de los resultados.

En resumen, el método consta en dar un puntaje a cada jugador según el nivel del club en el que juega. Luego sumamos los puntajes de los jugadores de cada país y obtenemos el puntaje por país.

He tratado de ser lo más objetivo del mundo al establecer los niveles y puntajes. De todas formas quedo abierto a cualquier crítica alturada. Ya detecté un primer error al darle al Atlético Nacional de Colombia el nivel América 2 en lugar de América 1. Pero como dicen los gringos "shit happens".

Este es el cuadro base para mi análisis:

ZONA/NIVEL                 PUNTAJE

EUROPA 1                      20

AMERICA 1                    18

EUROPA 2                      16

AMERICA 2                    14

ASIA 1                             12

EUROPA 3                       10

AMERICA 3                      8

ASIA 2                              6

El listado de jugadores por países y clubes donde juegan lo enviaré a solicitud del lector, no hay nada que esconder pero sería tedioso de leer. El resultado que obtuve fue el siguiente:

PAIS                                     PUNTAJE

ARGENTINA                       410

BRASIL                                404  

COLOMBIA                          360

URUGUAY                            360

CHILE                                   342

PARAGUAY                          326

ECUADOR                            312

PERU                                    306

BOLIVIA                               276

VENEZUELA                        254

Como se puede apreciar, no atiné con exactitud en las posiciones de los equipos, ya que ello es imposible de predecir, pero sí hubo un acercamiento a la realidad de los distintos países de la zona sudamericana.

Este artículo es básicamente un ejercicio de lo que puede ser un verdadero cálculo matemático de las probabilidades de Perú en un torneo internacional. No quiero escuchar más esa bendita frase “matemáticamente no estamos eliminados” sin un sustento real. Los puntos que quedan en disputa es un aspecto absolutamente insuficiente, engañoso y triste.

Mi verdadero propósito es aplicar este mismo análisis en eliminatorias por eso usé la Copa América como un experimento. La Copa América al ser un torneo corto y donde los jugadores están concentrados más de un mes funciona de manera muy distinta a las eliminatorias donde el tiempo es corto y el valor de cada jugador es mucho más determinante.

Por eso es que Perú tiene buenos resultados en Copa América, están concentrados durante todo el torneo, tienen partidos bastante seguidos y logran una mística y personalidad que no se ve en eliminatorias. Esto sucede porque el peruano es débil en aspectos psicológicos y sociológicos. Tarda en identificarse con el grupo, en comprometerse, en creerse el cuento, en sacrificarse por el compañero, en dar el ejemplo. Desgraciadamente el futbolista peruano es un reflejo de los que somos los peruanos y si queremos que cambien debemos cambiar todos.

Cuando salgan las listas de convocados de la próxima fecha doble de eliminatorias prometo un nuevo análisis el cual estoy convencido que será aún más certero.

A los 17 años aposté que Perú no iría al mundial ni en 20 años, van 23 y subo la apuesta a 40. Es decir, mi pronóstico es que que iremos al mundial del año 2034 cuya sede será Perú.